Descubre que eres: Coach, Tutor, Orientador, Asesor o influencer

¿Coach, influencer, tutor y educación en la misma frase? Como puede ser que se puedan comparar estos conceptos. ¡Pues sí, se puede hacer!. La definición de coach es principalmente la de formar o motivar a alguien en un ámbito concreto. Por tanto podemos entender que tiene cierto parecido con la posición que adquiere un tutor en el aula. Al tutor se le define como: profesor particular encargado de la educación de los hijos de una familia. Por tanto, en un principio el tutor no debe ser un coach aunque todos sabemos que en muchas ocasiones se acerca a la primera definición de forma peligrosa, adquiriendo un cariz más motivacional que otra cosa. 

Si nos centramos en el siguiente concepto que debemos conocer es el de orientador que se le describe como la persona que es consejera de orientación pedagógica o profesional. Esta definición nos explica que debe ser un profesional pedagogo o psicólogo el que debe acceder a este tipo de tareas que son de una gran complejidad.

Respecto al concepto de influencer podemos definirlo como aquella persona que influye en otros en algún aspecto concreto como por ejemplo la moda. Por último, tenemos el concepto de asesor que consiste en dar consejo o información sobre alguna cuestión en especial.

Teniendo en cuenta estas definiciones podemos ver algunos paralelismos en el mundo de la educación entre el tutor, el asesor y el coach. Oficios distantes pero parecidos en el fondo. Una fina línea separa al tutor de ser asesor de sus alumnos o de un motivador o coach de ellos. La enorme influencia que en ocasiones este tiene sobre su alumnado lleva a que su influencia sea mucho más que la de un educador que expulsa ante sus alumnos una serie de conocimientos que pretenden introducirse en ellos.

Si bien es cierto, en muchas ocasiones el alumno tiene más relación con el tutor al que ve como un verdadero referente, y es en esta concepción donde se aúna todas las definiciones. Acceder a ser tutor recién salida del máster me aterra, sobre todo porque yo no soy pedagoga, ni psicóloga (ni aspiro a serlo) soy una humilde historiadora y aspirante a profesora.

Bien, teniendo en cuenta esto el tutor debe ser un motivador del alumno de eso no hay duda pero, ¿Hasta que extremo debe llegar la implicación de este con su alumnado? No podemos olvidar que la profesión de docente debería ser eminentemente vocacional. Por tanto, debemos tener en cuenta que la implicación en ocasiones del tutor llega a ser en ocasiones excesivo. Además, la posición de motivador del profesor creo es necesaria, pero más necesario es un cambio del sistema educativo, que verdaderamente haga que el profesorado tenga margen y sobre todo capacidad para motivar en gran medida al alumnado.